Dejamos aquí un listado de cagadas típicas relacionadas con el mundo de pedir tarjetas y aspectos que hay que tener en cuenta. Nunca es tarde para rehacer tu vida y volver al redil de los puntos si tienes a La Ahorrateca de tu lado.
NO DISTE EL NÚMERO DE LA SEGURIDAD SOCIAL (SSN) A TU BANCO
Quizás al llegar al país te sacaste una cuenta bancaria con apenas el pasaporte y algún documento con tu dirección, y ya luego no te pasaste a notificarles tu SSN. Al no darle tu SSN al banco no hay manera de que las agencias que valorán tu credit score puedan comprobar que existes de verdad, así que cuando intentas pedir una tarjeta te la deniegan sin muchos paliativos.
NO PREGUNTASTE A LOS CHICOS DE LA AHORRATECA
Cuando se pide una tarjeta el contexto y el historial de cada persona es diferente. Si pides una tarjetas por puro impulso o porque alguien te la recomendó sin preguntarte nada sobre tu historial crediticio, línea de crédito abierta, tiempo en el país o solicitudes anteriores, por mencionar algunos factores, las posibilidades de que te la aprueben o de que esa sea la mejor tarjeta para ti, disminuyen drásticamente. Como curiosidad, hemos hecho charlas personalizadas donde hemos recomendado a la persona no sacarse ninguna tarjeta porque en ese momento, pese a las ofertas existentes, le hubiera perjudicado a largo plazo.
NO USASTE TU CRÉDITO COMO SI FUERA DÉBITO
Si gastas lo que no tienes o no pagas lo que debes RELIGIOSAMENTE, la mayoría de los consejos de La Ahorrateca NO funcionan. Dejar a deber, hacer solo el pago mínimo o apurar al máximo el crédito supone por un lado tener que pagar intereses muy elevados, y, por otro, destrozar tu credit score. Ouch!
PEDISTE DEMASIADAS TARJETAS FULERAS
La carne es débil, y el desconocimiento más aún. Si antes de conocer La Ahorrateca y nuestras charlas caiste en la tentación de tarjetas como la del TJ Maxx, Apple o Macy´s hay algunos bancos que eso no les va a gustar y te pueden denegar ciertas tarjetas muy potentes que ofrecen mayores beneficios que un 10% en ropa interior. Si no estás seguro de cuál es la mejor tarjeta en tu situación, puedes agendar una sesión con nosotros para que te guiemos.
NO ESPERASTE 90 DÍAS ENTRE PETICIONES DE TARJETAS
La regla no escrita entre los expertos tarjeteros es que pedir más de una tarjeta sin esperar 90 días es muy arriesgado en la mayoría de casos. Los bancos ven ese comportamiento como sospechoso y en algunos casos tienen sus propias normas de cuántas tarjetas pueden emitir en un periodo concreto. Esta regla puede a veces tener ciertas excepciones, pero a nivel general, los 90 días es una buena manera de no perder magníficas oportunidades.
Si vas a tener un gasto grande en ese intervalo nuestro consejo es que hagas uso de nuestro servicio personalizado para ver si tu contexto te permite pedir de manera segura alguna tarjeta preaprobada.
NO SABÍAS LO DE LA REGLA DE 5/24
La regla 5/24 alude al número máximo de peticiones (aprobadas o no) de tarjetas en los últimos 24 meses. Esta regla es la que aplica Chase, y supone que si en 24 meses has pedido 5 tarjetas (sean de Chase o no), lo más seguro es que NO TE APRUEBEN esa 6ª petición. Es importante tenerlo en cuenta cada vez que una tarjeta nos hace tilín porque puede que esa tarjeta tan chula de Amazon o TJ Maxx luego no te permita acceder a tarjetas como la Sapphire o alguna aerolínea que trabaje con Chase tipo United, Southwest o Iberia.
NO SEGUISTE UN ORDEN LÓGICO Y CABAL
Cuando hay tarjetas que ofrecen 60, 70 u 80 mil puntos es normal que las primeras tarjetas con 100$ de bonus o 20.000 puntos nos parezcan insípidas. Sin embargo, seguir el ritmo adecuado, crear credit score y no querer correr demasiado son las 3 claves para alcanzar el nirvana tarjetil. El orden habitual lo hemos explicado aquí, y una vez llegas a esa tercera tarjeta, lo mejor es tener claro qué queremos hacer con nuestros puntos, ya sean viajes, iphones o status en cierta aerolínea. Si todo esto se te hace un mundo, puedes rellenar nuestro formulario y te ayudaremos por cuatro duros.
Buen momento también para recordar que en algunas páginas especializadas y en los propios bancos a veces se indica qué score se requiere para poder optar a ciertas tarjetas.
GASTASTE MÁS DE UN 20 O 30% DE TU LÍNEA DE CRÉDITO
Un factor básico en la creación del credit score es tu patrón de gastos y pagos. Si usas un alto porcentaje de tu línea de crédito el banco y las agencias evaluadoras del score piensan que no eres trigo limpio, así que lo mejor es no usar más de ese 20% de manera habitual. ¿Significa eso que SOLO puedo usar esa cantidad cada mes? ¡NO! Lo que esto significa es que si u̶n̶a̶ ̶n̶o̶c̶h̶e̶ ̶t̶e̶ ̶p̶e̶g̶a̶ ̶l̶a̶ ̶f̶i̶e̶s̶t̶a̶ ̶d̶e̶ ̶t̶u̶ ̶v̶i̶d̶a̶ ̶y̶ ̶s̶u̶c̶u̶m̶b̶e̶s̶ ̶a̶ ̶t̶o̶d̶o̶ ̶t̶i̶p̶o̶ ̶d̶e̶ ̶p̶e̶c̶a̶d̶o̶s̶ ̶c̶a̶r̶o̶s̶ compras un ordenador que vale 1.500$ y tu línea de crédito son 2.000$, tan pronto como salga el gasto reflejado en tu cuenta, te interesa pagarlo cuanto antes para que ese gasto tan elevado no sea reportado a las agencias evaluadoras. Seguir esa rutina permitirá que crezca tu score, y tras dos o tres tarjetas, al tener una línea de crédito más abundante, los gastos normales supondrán un % muy pequeño del total, lo que también favorecera a tu image ante los bancos y la valoración de tu credit score.
TE PUSIERON DE AUTORIZADO EN DEMASIADAS TARJETAS
Enteder este concepto es un poco más complicado. En principio estar autorizado en una tarjeta o varias te favorece porque se te copia el score de la otra persona. Ahora bien, algunos bancos y sus sistemas a veces computan esas autorizaciones como tarjetas propias, por lo que en cierto punto de tu odisea tarjetera puede que te denieguen una tarjeta porque "ya tienes demasiadas". En ese caso la solución suele ser sencilla y con tan solo llamar al banco pueden arreglar ese malentendido. Aquí lo hemos explicado con más detalles.
NO ANALIZASTE EL VALOR FUNCIONAL DE LOS PUNTOS
Incluso entendiendo lo básico de tarjetas y los tiempos que hay que respetar, puede que se te hayan ido los ojos con alguna tarjeta que ofrece 150.000 o 200.000 puntos. Siendo esto algo de lo más normal, la clave será conocer por un lado la flexibilidad de esos puntos y por otro el valor al cambio. Por ejemplo, muchas de las tarjetas de hoteles ofrecen bonus muy altos, pero luego hay que ser consciente de lo que puede costar una noche con puntos en esa cadena. De igual manera, quizás hay una aerolínea o banco que ofrece muchos puntos pero luego esa tarjeta no ofrece la posibilidad de acumular puntos en el día a día o en combinación con otras ofertas o su valor en dinero es siempre bajo comparado con el resto.
CANCELASTE UNA TARJETA EN LUGAR DE DOWNGRADEARLA
Llega un momento en la vida de todo tarjetero en el que algunas de las tarjetas ya no son necesarias o ya no ofrecen tantas ventajas como algunas nuevas. En ese punto de tu travesía de tarjetas el instinto es cancelar la tarjeta para dejar de pagar esa cuota anual o porque no le das ningún uso...pero esto en ciertos contextos te puede perjudicar mucho, sobretodo en los inicios. Cancelar una tarjeta es un acto que te hace que baje el score por dos razones: Rechazas esa cantidad de línea de crédito y pierdes antiguedad de crédito. Es por ello, que la recomendación es siempre llamar al banco para downgradear esa tarjeta y mantenerla con los mismos números pero bajo el nombre de otro producto. Ejemplos típicos serían la Sapphire pasa a una Flex o la Amex Delta Gold pasa a Delta Blue, por dar un par de ideas.
NO PUSISTE EL SUELDO DE LOS DOS EN LA PAREJA
Si hay amor verdadero, es muy recomendable que en las solicitudes de tarjeta se sumen los dos sueldos en el hogar, ya que eso es lo que utilizarías si tuvieras que pagar una deuda imprevista o muy elevada.
EL GASTO MÍNIMO ES MUY ALTO
A veces la obsesión por obtener puntos a toda costa hace que olvidemos que para cumplir el gasto mínimo del bonus hay que hacer...¡GASTO! Nuestro consejo más habitual en la charlas personalizadas es que solo pidas tarjetas con las que te sientas cómodo y que no fuercen cambiar tu estilo de vida o gastos habituales. Ahora bien, hay distintas maneras de acercarse a cierta cantidad de gasto si nos planificamos bien, siendo la base de ello el "adelantar" pagos. Por ejemplo:
-Comprar tarjetas de regalo que sepas que vas a usar (supermercado, teléfono, hoteles, airbnb...)
-Pagar el seguro del coche con esa tarjeta
-Pagar el alquiler con esa tarjeta si te compensa el bonus vs la penalización habitual del 3%
-Planificar tus dos próximas vacaciones y tener ya el hotel y coche de alquiler
En definitiva, es muy importante, antes de pedir cualquier tarjeta, que sepamos dónde nos estamos metiendo y cuál es la manera más efectiva de hacerlo. Y para ello nada mejor que seguir leyendo y preguntar antes de hacer nada.